Actualmente, vivimos en una sociedad capitalista en la que crecer económicamente no es sinónimo de indicadores de mejora de desigualdad y ello exige que se tengan en cuenta y utilicen otras medidas e instrumentos para fomentar la justicia a nivel social, económico y político. Estas otras formas de hacer y cómo son utilizadas por la organización cusqueña Guaman Poma de Ayala, es lo que se tratará a lo largo del presente artículo. La lectura del documento no pretende mostrar la verdad absoluta, pues entendemos que esta no tiene cabida en el siglo XXI, muy al contrario, pretendemos que sea un instrumento de reflexión y un espacio de diálogo. Por ello animamos a los y las lectores/as a comentar todo aquello que deseen en el enlace al final del documento.
El contexto internacional durante las últimas décadas se viene caracterizando por una serie de transformaciones a todos los niveles que ha ocasionado la aparición de nuevos actores diferentes a los Estados nacionales. Hablamos aquí de los territorios y de cómo estos han ido haciéndose un hueco en las agendas políticas (a nivel global en los Objetivos de Desarrollo Sostenible). En esta situación, los gobiernos territoriales se convierten en importantes actores de esta transformación, que es necesario tener en cuenta. Con ello no queremos decir que los Estados Nacionales no promuevan políticas nacionales, sino que estas partan de los diversos territorios que lo convergen; es decir, es vital que los Estados centrales tengan políticas nacionales de corte territorial con el objeto de reducir desigualdades e inequidades.
Para ello se requiere un importante cambio cultural, que implique adquirir una cultura de negociación, una cultura de cooperación, alejado de visiones simplistas como el hecho de que lo local todo lo puede o que el Estado central es el ente que mejores políticas realiza. Se trata de articular las dos dimensiones de las políticas, pero teniendo en el centro de la gestión a los actores del territorio. Para que tal visión se lleve a cabo se han de dar tres factores según Gallicchio (2017): la gobernanza multinivel, el desarrollo económico local y la construcción de capital social.
Con respecto a la gobernanza multinivel (local, regional y nacional), se parte de la base que el desarrollo local mejora la gobernanza en todos sus niveles, ya que acerca el gobierno a la ciudadanía y viceversa. Con ello se producen una serie de efectos beneficiosos para la gobernabilidad y para las personas, como el que las necesidades y demandas sean más tenidas en cuenta, que la población se interese por el desarrollo del territorio, se incrementa la cooperación ciudadana, etc. Con este primer factor se pretende recuperar el vínculo gobierno-ciudadano, elemento clave para la legitimidad de las formas de gobierno. Ello implica que se combinen la lógica vertical y sectorial con una lógica horizontal, territorial y de redes, que a su vez permitirá una colaboración permanente entre diferentes territorios que hará que cada municipio aporte su experiencia para que pueda ser aprovechada por el otro (intercambio territorial).
Por otro lado, es necesaria una mayor importancia del desarrollo económico local como forma de generar empleo y desarrollar, a todos los niveles, las potencialidades del territorio.
Por último, se ha de considerar la construcción de capital social, es decir, de una serie de intercambios horizontales beneficiosos entre las personas y las diferentes redes sociales existentes en el territorio. Con ello se pretende principalmente facilitar la coordinación y la cooperación en beneficio mutuo.
Para que se den estos tres factores se ha de contar con una gobernanza adecuada a las demandas y necesidades de la población. Así, después de más de setenta años de la Conferencia de Bretton Woods, donde se crearon el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, la comunidad internacional sigue reconociendo que para promover el desarrollo sostenible se debe considerar los determinantes básicos relacionados con la gobernanza. Esta gobernanza debe ser multinivel para constituirse como un mecanismo de diálogo y construcción cooperativa del desarrollo humano. En este sentido, se vuelve necesario el que se creen políticas públicas más abiertas y flexibles, que contemplen a todos los sectores y actores del territorio desde una perspectiva global e integral. Para ello, es fundamental que se creen estrategias entre el medio rural y el medio urbano, para aprovechar los recursos tanto endógenos, como exógenos y promover el desarrollo territorial.
La misión de los poderes públicos sería asegurar el funcionamiento de un buen sistema de gobernanza en el territorio, a través, entre otras, de la existencia de instituciones locales que promuevan el desarrollo.
En este punto y relacionándolo con la Cooperación al Desarrollo, es básico el utilizar la participación ciudadana y de los territorios como instrumentos para la toma de decisiones y para dar respuesta a las necesidades y demandas que estos consideren. Es por ello que el desarrollo económico local lo consideramos el enfoque a través del cual se ha de realizar Cooperación al Desarrollo (Humano Local). Es necesario recalcar que tal cooperación es únicamente un apoyo para el desarrollo, pues este último lo construyen los pueblos. La Cooperación al Desarrollo es solo un instrumento más dentro de todos los existentes que, bien realizada, colabora en el desarrollo local.
Ejemplo de Cooperación enfocada a la buena gobernanza lo realiza la organización Guaman Poma de Ayala, concretamente la Escuela de Gobernabilidad, espacio donde hemos desarrollado las prácticas extracurriculares. A continuación, explicaremos en qué territorio trabaja esta y qué funciones realiza:
Escuela de Gobernabilidad trabaja en el departamento de Cusco, el cual cuenta con unos 71 986 km² de superficie, siendo el cuarto más extenso del país, con una población de 1 205 527 habitantes y está dividido en unas 13 provincias. Conocido por ser la antigua capital del imperio incaico, es una de las regiones con mayor turismo de Perú.
Este departamento, al igual que en gran parte del territorio peruano, existen desigualdades y falta de oportunidades, sobre todo, para la población que se sitúa en las zonas rurales y periurbanas, alejadas de los centros de actividad turística o industrial. Cusco es el sexto departamento con más población rural, viviendo en las zonas rurales el 44% del total. Esta población en algunos casos no cuenta con los servicios básicos como es el acceso al agua potable (donde el 28% de la población carece de esta)2, o electricidad (el 27,8% no tiene)3, además también hay que tener en cuenta que parte de la población es Quechua hablante, hecho por el cual algunas personas sufren discriminación. Esta discriminación se convierte en múltiple en el caso de la mujer, pues además de este tipo de discriminación sufre la derivada del sistema patriarcal vigente actualmente.
En el departamento de Cusco según la ENDES 2014, el 41,4%4 de las mujeres manifiesta que ha sufrido algún tipo de violencia física o sexual por parte de su pareja. Convirtiendo a Cusco en el tercer departamento peruano donde mayor violencia existe hacia la mujer.
En este contexto el Centro Guaman Poma de Ayala y más concretamente su área Escuela de Gobernabilidad tiene como objetivo contribuir al fortalecimiento de las instituciones locales mediante acciones de capacitación y formación de: Alcaldes/as, Regidores/as, funcionariado y servidores/as municipales, así como dirigentes de organizaciones sociales, estudiantes y población en general, sobre el manejo y desarrollo de la estructura y acción municipal en pro del desarrollo local, en la macro región sur. La capacitación es a través de una propuesta modular que supone una formación continuada, profunda y especializada en tres especialidades:
Gerencia Administrativa Moderna
Gestión Democrática del Territorio
Ciudadanía y Gobernabilidad.
Para abarcar estas tres especialidades se encarga de realizar talleres formativos y cursos sobre distintas temáticas como son género, mejora de procesos administrativos, trato adecuado y derechos de las personas con discapacidad, interculturalidad, educación a padres y madres, Derechos Humanos... Además, algunos de estos talleres (cuando es necesario) se realizan en quechua, siendo accesibles también a la población rural.
Esta formación a la población local tiene la finalidad de que ésta sea la encargada de gestionar y llevar a cabo los procesos de gobernabilidad, siendo Guaman Poma de Ayala únicamente un apoyo instrumental para el desarrollo. Este hecho, lo consideramos básico pues es el personal local el que continuará con el proceso una vez la Cooperación desaparezca del ámbito donde se encontraba. Así, rechazando las situaciones de dependencia que se pueden producir, abogamos por el desarrollo de capacidades de la población y muy especialmente de las autoridades locales y regionales, con el fin de maximizar el rendimiento de la gestión, y el impacto político y territorial.
Además, Escuela de Gobernabilidad, con sus acciones contribuye al desarrollo económico local de las diferentes municipalidades, pues a través de la realización de los planes institucionales que ayuda a crear al personal funcionariado de estas, focaliza en gran medida cómo la población puede enfocar el desarrollo a través de la producción local (mercado de flores, gastronomía local, etc.)
Por lo tanto, Escuela de Gobernabilidad lleva a cabo dos de las tres gestiones básicas expuestas por Gallicchio (2017): el desarrollo económico local (a través de la creación de los planes institucionales) y la construcción de capital social (a través de las diferentes capacitaciones a personal público y tercer sector). Esto lo complementa con la gobernanza multinivel, pues intenta que las diferentes municipalidades estén en consonancia con lo desarrollado por estancias superiores (región, Estado, etc).
Como se puede comprobar la Cooperación al Desarrollo es muy necesaria para contribuir al impulso de diferentes regiones, pues es uno de los varios instrumentos que ayudan a ello. Para que esta se siga desarrollando, a nivel de instituciones internacionales (Naciones Unidas, Unión Europea…) y de los diferentes gobiernos nacionales y regionales se han de seguir manteniendo y fomentando los fondos públicos a la Cooperación. En este sentido, se ha de considerar el actual momento en el que se encuentra la política andaluza, con el acceso al poder de partidos políticos que no priorizan estos aspectos. Tal es el caso, que en el “Acuerdo entre el Partido Popular y Vox para la investidura del presidente de la Junta de Andalucía”, el punto 37 indica: “Trabajar para que, en el marco de las ayudas a la Cooperación Internacional al Desarrollo, se den pasos decididos hacia una gestión nacional de estos recursos.” Es decir, se pretende la eliminación de la política regional de Cooperación al Desarrollo. Este hecho tal y como expone la Coordinadora Andaluza de ONGD (Caongd), ignora la legislación estatal y es contrario al Estatuto de Autonomía de Andalucía.
En este punto muy importante que la población y las diferentes organizaciones se alcen en contra de estas políticas, exigiendo a los gobernantes el cumplimiento de la legislación vigente y la apuesta por el respeto a los Derechos Humanos.
En conclusión, consideramos que la Cooperación es un instrumento eficaz para el desarrollo de la población en todos los niveles. No obstante, el desarrollo es un problema estructural al que hay que darle una solución sistémica. Con esto queremos decir, que la Cooperación al Desarrollo es un instrumento que puede contribuir a la justicia y equidad social, pero no el único. El hecho de que actualmente muchas de las políticas públicas estén basadas en la privatización, desregularización y liberalización contribuye a crear una sociedad más desigual. Es por ello que, se necesita el apoyo de todas las instancias nacionales, regionales e internacionales y de la Cooperación para hacer de la sociedad un lugar más justo y equitativo.
Le proponemos las siguientes preguntas para reflexionar: ¿Cree que la Cooperación al Desarrollo actualmente es necesaria para el desarrollo de diferentes regiones? ¿Considera el Desarrollo Local como el modelo que se ha de seguir para realizar Cooperación? ¿Qué opina del punto 37 del acuerdo político anteriormente mencionado? Estas como otras sugerencias, preguntas o reflexiones podrán realizarse en el siguiente enlace:
Referencias:
Gallicchio, E. (2017). Desarrollo local y cooperación al desarrollo: ¿Una nueva generación al plataformas de cooperación para el desarrollo local?. Cuadernos del Claeh, 36(105), 63-73.

